La placa funeraria Rosa es un homenaje delicado y emotivo que incorpora la rosa como elemento central de su diseño. Este símbolo universal del amor eterno acompaña los datos conmemorativos —nombre, fechas y dedicatoria— en la zona central, transmitiendo sensibilidad y ternura.
Su estética convierte la placa en un recuerdo íntimo y especial, perfecto para quienes desean expresar cariño y memoria de manera sencilla pero significativa. El modelo se ofrece en dos acabados de color: dorado y plateado, lo que brinda la posibilidad de elegir entre un estilo cálido y tradicional o uno sobrio y elegante.
Cada placa se elabora sobre un soporte metálico sólido y estable, que garantiza firmeza y una excelente presencia. La personalización se realiza mediante grabado directo sobre la superficie, una técnica que permite reproducir con gran precisión tanto la rosa como los textos elegidos. El contraste entre el acabado mate del fondo y el brillo del grabado aporta profundidad y realza cada detalle del diseño.
Gracias a su resistencia y durabilidad, la placa está pensada para conservar su aspecto impecable incluso en exteriores, soportando las condiciones ambientales sin deteriorarse. Es una opción ideal para columbarios, mausoleos o panteones, donde ofrece un recuerdo duradero y de gran valor estético que permanece intacto con el paso del tiempo.
La placa Rosa está disponible en un único tamaño de 23 x 16,5 cm, formato que se adapta perfectamente a nichos de medidas medias. Su instalación se realiza mediante adhesivo de doble cara de gran resistencia, que garantiza una fijación firme y sin necesidad de perforar. Este sistema de colocación es práctico, rápido y estético, permitiendo mantener la superficie original de la lápida intacta y ofreciendo un resultado limpio y seguro que se conserva con los años.
